Uno tiende a creer que puede hacerlo y «¿para qué pagarle a otro?». Hasta que me di cuenta de que necesitaba de alguien que entendiera realmente el mundo de las redes y los textos. Zapatero a su zapato. Por eso decidí contactar a Lisandro.
Con sus textos aumentó mi número de seguidores e interacción. Hubo mayor concreción de ventas.
Si hay algo que debo destacar, es que supo captar la esencia de mi marca y se vio reflejado en los textos.
Y no solo esto, también tuve:
- Mayo y mejor llegada al cliente.
- Saber cuándo, cómo y qué decir.
- Pude dejar que se ocupe una persona idónea de la parte comunicacional de mi emprendimiento. Esto me ayudó a no perder energías en eso u obligarme a publicar cuando no estoy inspirada.
Sin dudas, el copywriting es algo que recomendaría a todos los que estén emprendiendo. No lo duden. Mejor es tener a alguien que sepa cómo captar a tu cliente ideal, que sepa cómo comunicar, cómo llegar y transmitir, que perder tiempo y energía en vano.